<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d18701410\x26blogName\x3d%C2%BFY+a+ti+a%C3%BAn+te+cuentan+cuentos?\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLACK\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://sherezadecuentacuentos.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_ES\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://sherezadecuentacuentos.blogspot.com/\x26vt\x3d-385038471514110299', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

¿Y a ti aún te cuentan cuentos?

 

París

París nunca nos quiso. Tú (y todos los tús) no tenías ni idea, claro, y paseabas por sus calles como un niño que de repente es capaz de llegar a las nubes y pintarlas de colores. No sabías, como yo, que pronto tendríamos lluvia de matices y , lo que aún es peor, que una vez acabados los primarios, sólo quedaría un gris plomizo en la boca del estómago, de esos que sólo saben llorar hacia arriba, inundando la garganta hasta vomitar lágrimas desalinizadas por los acentos circunflejos.

Quizás sólo se trata de que París nunca me quiso a mí y con ello arrastré sombras que nunca debieron pisar la ciudad de las luces. Quizás sólo se trata de que a París no le gustaban las dimensiones de mi altura, mis pies pequeños, mis dedos largos y mis estrechas muñecas. O puede que sea cosa de la tonalidad extraña que provoca la combinación de los ojos verdes, la piel clara y el rojizo de mis rizos, quizás si hubiese tenido los ojos azules me habría adoptado como una hija. A veces hasta he llegado a pensar que no le atraía la conjugación de mis eses andaluzas y mis (escasas) palabras en euskera. Incluso es posible, aunque lo dudo, que se tratase de mis ideas, quizás París no acepte que alguien que estudió para cambiar el mundo no sea capaz de domar ni el suyo propio.

Si lo pienso con calma, con la espalda recta y la mirada fija en mi pared verde, entiendo perfectamente mi contradicción con París. La entiendo como comprendo mi lista inmensa de contrariedades vitales, así que era obvio, yo nunca podría enamorarme en París. Imposible. Decido coger mi pluma y escribirlo en ese inventario inacabable e inabarcable de discordancias que guardo en el hueco intercostal. Bajo la inquietante mirada de otras paradojas que ni pude ni quise resolver.

Algún día volveré a París. Mientras tanto, mis pasos resonarán por unos días en las orillas del Danubio. A ver si Budapest si nos quiere.

« Home | Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »

At 11:17 p. m., Blogger el_Vania said...

Será una buena opción, probar con Buda+Pest a ver que pasa, a ver si ese París despechado abre los ojos y empieza a añorarnos.
Pero pesa como una losa la frase lapidaria célebre por la película... ya sabes...
"Siempre nos quedará París..."
Salud/OS!    



At 8:51 a. m., Blogger Poledra said...

Pues Paris se lo pierde :-)

Seguro que Budapest no puede resistírsete!    



At 10:33 a. m., Anonymous Anónimo said...

Me acabo de dar cuenta de dos cosas:

1- Que los maleficios son maleficios hasta que se rompen.
2- Que tengo que comprarme una guia.    



At 2:26 p. m., Blogger BLQ said...

precisamente acabo de llegar de unos días por Paris, es mi segunda visita y muy diferente que la primera

primero por razones distintas y segundo porqué no he visitado el París turístico, el internacional, sino que me he demorado por los pequeños squares de barrio repleto de parisinos/as deborando libros.

París tampoco me quiere y a mí no me atrae, pero veo que mis días me llevaran más a menudo por esta capital

saludos    



At 3:47 p. m., Blogger Iraultza said...

París es muy caprichosa, por eso hace como que no te quiere, pero sólo finge...por eso le das celos con Budapest ( y a mí envidia, je). Besos europeos.    



At 10:39 a. m., Blogger sb said...

estudiar para cambiar el mundo sospecho es la mejor forma de darse cuenta que el mundo no tiene arreglo... y tranquila, Paris es una cuidad sin alma, como todas las grandes ciudades...    



At 12:36 a. m., Anonymous Anónimo said...

Estimada amiga:

A lo largo de mi vida he llegado a comprender que las ciudades son entes vivos. Y uno acaba formando parte de ellas; respiras su aire, bebes su agua, escuchas su viento, sientes su vida...

Cualquier ciudad te lo ofrece todo, siempre y cuando estés pleno... porque si no es así acabará con uno. Y con los diferentes matices, da igual que sea París, Madrid, Alacant, Praga o Vigo.

Hasta que uno comprende qué lugar ocupa en el mundo los problemas irán detrás.

Esa es mi humilde opinión.

Un fuerte abrazo desde el Otro Lado, neska polita.    



At 9:44 p. m., Blogger Angus Scrimm said...

En alguno de mis paseos frecuentes por el Danubio que pasa por Viena, construiré un barquito de papel que fondearé cuando esté escrito un mensaje en el que opino de París... No te alejes mucho si te interesa, porfa...

besos    



At 7:37 p. m., Blogger el_hombre_que said...

Yo tengo unas fotos preciosas de París, y el francés siempre me encantó. Los crêpes...insuperables.
Just try again :)    



At 8:15 p. m., Anonymous Anónimo said...

Ni Tokyo, Tokyo don't love us anymore    



At 9:28 p. m., Blogger Pablo Esteve said...

Pasé dos años muy cerquita de París. Y esa guía es como un mar abierto, una posibilidad de huida. Las fotografías muy acertadas.
abrazos acuáticos    



At 9:28 p. m., Blogger Pablo Esteve said...

Este comentario ha sido eliminado por el autor.    



At 9:28 p. m., Blogger Pablo Esteve said...

Este comentario ha sido eliminado por el autor.    



» Publicar un comentario
 
   

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.




© 2006 ¿Y a ti aún te cuentan cuentos? | Blogger Templates by Gecko & Fly.
Ninguna parte del contenido de este blog deberá ser reproducida sin el consentimiento previo de la autora.